viernes, 19 de febrero de 2010

Todos los días se aprende algo (o mucho)

Leyendo "Fiebre y lanza" de Javier Marías he descubierto varias palabras que me han obligado a ir al diccionario. No me lo esperaba, pues hace mucho tiempo que lo uso como mero traductor cuando leo en inglés.
Bueno, pues aquí va la lista de palabras que he aprendido. No escribo el significado al lado por no aburrir, si alguien tiene curiosidad por alguna en concreto que levante la mano y se la explico (de todos modos, no es que sean vocablos para usar así, todos los días, francamente). La historia es el gusto que me ha dado aprender algo (tanto) nuevo leyendo. La de puertas que nos abren los libros...
  • lesa (humanidad): sí, se oye mucho en las noticias y demás, pero nunca me había parado a pensar que no sabía lo que significaba exactamente, ni mucho menos me había tomado la molestia de buscar su significado.
  • aquiescencia
  • engolamiento
  • dengue
  • présbita
  • consuetudinario
  • presciencia
  • sedente

Todo esto me recuerda, según escribo, a que hace cosa de un año más o menos también escribí sobre una palabra que había aprendido, en este caso gracias a una pregunta de una de mis alumnas y la flipante (y rápida) respuesta de Mathias: "parpar" era la palabra, el verbo usado para designar el ruido que hacen los patos. Me hace gracia recordar esa anécdota ahora que hablo de "palabras nuevas"

Por último, una frase de la novela, se me ha quedado grabada: "La lejanía convoca fantasmas. La soledad también. Y todavía a más la ignorancia". Qué grande, Marías.

Naranja


El día no puede ser más triste y gris, lluvioso, oscuro. Así que he decidido regalarme un poco de color, por qué no.
Y, como hacen en otros blog (me encanta éste: beauty comma; es muy, diría, femenino, ese es el adjetivo, y últimamente lo miro todos los días, es precioso) pongo una fotillo. Puede que sea un poco ñoño el hacer esto, pero me hace ilusión, qué boba.
Para terminar la tarde, con las manos en la masa: voy a darme al experimento del arroz con leche, mmmm, se me hace la boca agua sólo de pensarlo. A ver si sale rico ;-) Espero no distraerme demasiado con la música, me bajé ayer una selección de Edith Piaf y me flipa!!!!

miércoles, 17 de febrero de 2010

Arroz tres delicias


Pues sí, lo he hecho, y la foto es la prueba. Bueno, es una birria de foto, lo sé, pero es que la hice deprisa y corriendo, y no es una excusa, es la verdad. Teníamos que cenar rápido rápido porque acababan de llamar a Mathias con un aviso de la guardia (sí, otra vez de guardia...) y tenía que cenar en dos minutos y salir escopetado. Lo último que iba a ponerme a hacer yo es de Robert Kappa.
Ha salido bien rico, muy parecido al que se come en los restaurantes, no es por nada. Y fácil, facilísimo de hacer.
Ea.

martes, 16 de febrero de 2010

Manualidades y cosas de niños

Nunca han sido mi fuerte, pero un hijo me parece motivo poderoso para intentar superar mis barreras (qué dramático suena, perdón) y se me ha metido entre ceja y ceja que quiero hacerle algún juguete al enano. Con mis propias manos, claro que sí. Tengo en la cabeza un sonajero, pero acepto sugerencias. Es una excusa perfecta para husmear un buen rato en un par de tiendas ma-ra-vi-llo-sas de manualidades que hay aquí, un verdadero paraíso, lo juro. Quién fuera un poco hábil con las manos para poder aprovechar todo eso!!!!!

Para lo que seguro que necesito ayuda es para recolectar canciones y cuentos. No recuerdo apenas ninguna/o, tampoco han sido nunca mi fuerte. Y quiero que el nene conozca algo tan, no sé, tan importante en cualquier cultura, no? Me refiero a los cuentos y canciones infantiles. Aquí seguro que oirá los de aquí, en flamenco, pero, coño!, que va a ser medio español!!! (con ñ)
Alguien me echa una mano?
Yo voy a intentar escribir mi propio cuento, pero aún no sé muy bien cómo. Y lo de cantar todo el mundo sabe que no, que no se me da, que en mi familia tenemos todos un oído enfrente del otro.
Aún así, a cantar se ha dicho. Pero necesito repertorio. Es decir, más ayuda ;-)
Lo que hay que hacer por un hijo....

No sólo de pan vive el hombre

Hace ya unas semanas que tengo mi pequeño proyecto culinario paralelo. No he puesto muchas fotos ni comentado demasiado, no sé, porque se me ha olvidado.
Pero vuelvo a la carga. No sólo en la cocina (que no haya escrito sobre ello no significa que no haya cocinado últimamente, al contrario! ) sino también con el blog. Esta vez con fotos.

Entre mis planes-platos inmediatos están un bizcocho (el último que hice no era precisamente una obra de alta cocina, pero ya sé qué errores tengo que enmendar), arroz con leche (aunque el de mi madre siempre me hará sombra, pero hay que atreverse con todo en la vida. Por cierto, que siempre me han dicho en casa que es típico de Asturias y yo lo he creído todos estos años a pies juntillas. Es cierto? Alguien lo sabe? Es realmente típico asturiano o es más bien de todas partes? Me asalta la duda porque aquí en Bélgica hacen un postre muy muy parecido...), arroz tres delicias (sí, sí, como el que ponen en los chinos, se me ha antojado), un risotto (cuánto arroz, no?) y algo más que aún no se me ha ocurrido para el sábado por la noche, que vienen amigos a cenar, momento ideal para probar recetas nuevas. Hay que dejar espacio a la improvisación y la creatividad, no?

Más películas

Sigo, seguimos, en nuestro invierno más cinematográfico. Desde la última vez que escribí sobre ello, he/hemos visto: "The third man", "Ladrón de bicicletas", "The French connection", "Unforgiven" ("Sin perdón", en español), " Slumdog millionaire" (por segunda vez, ya que la primera fue en el cine el año pasado; si no recuerdo mal, en su momento ya escribí sobre ella, me gustó tanto...), "El apartamento" y, yo sola, "Amelie".
Sólo "The French connection" me defraudó. Las otras -mucho clásico, mucha en blanco y negro- han sido todo aciertos. Me han dejado un regusto maravilloso, único, como sólo el buen cine deja.
Y "Amelie", en fin, qué puedo decir. Sigue siendo mi favorita, después de tantos años, después de tantas pelis. No recordaba bastantes detalles, ni el final. Y me llevé una sorpresa: para mí era roja, una película en color rojo. Pero no, ayer me resultó verde, sorprendentemente.
Como los buenos libros, puedes verla una y otra vez (leerlos una y otra vez) y descubres siempre pequeños tesoros. La historia es casi lo de menos.
Coincidencia o no, cogí el otro día de la biblioteca el primer libro de la última trilogía de Javier Marías, "Tu rostro mañana". Según avanza mi lectura, voy dándome cuenta de que ya lo he leído antes, hace lo suficiente como para no recordarlo cuando lo cogí y lo suficientemente poco como para ir recordando personajes, diálogos, escenas, pensamientos, a medida que leo. Curiosa sensación esta de recordar y no al mismo tiempo, de saber que algo no te es nuevo pero tampoco ajeno del todo, no saber cómo terminará pero tampoco importarme mucho. Relectura de una gran novela pero inconscientemente al principio. Casualmente? Ahora, definitivamente, es de forma consciente.

jueves, 11 de febrero de 2010

No se acaba

El invierno. Qué largo!!!Ya, ya lo sé, oficialmente dura hasta el 21 de marzo, pero madre mía, qué hartura.
Antes de ayer nevó otra vez, y desde entonces no ha parado. Todo blanco otra vez, precioso, parece diciembre. No, diciembre otra vez, no, por favor!!!Yo quiero primavera!!
Si sólo fuera nieve, pues vale. Pero no, no es sólo eso, es el frío que hace otra vez. Sin pasar de 0 grados en ningún momento, y por las noches en torno a menos cinco, terrible!!!
Y yo como tonta me flipé la semana pasada cuando oí al primer pájaro piar en meses, ingenua de mí!!!Nada, como los animales, a hibernar de verdad, y el estallido de vida (nunca mejor dicho) vendrá con la primavera. Mientras tanto, pues eso, más pelis, manualidades, libros, cocina, crucigramas y, la última, blogs y webs sobre decoración, diseño y semejantes, para sacar ideas para la casa nueva. Con algo hay que entretenerse, no?

lunes, 8 de febrero de 2010

Los olores

Es curioso cómo no sólo las personas, sino también las casas tienen su propio, particular e intransferible olor. Ni bueno ni malo (la verdad es que no recuerdo ninguna casa a la que haya entrado en la que oliera mal, a diferencia, aquí sí, de algunas -muchas- personas), simplemente, suyo.
Me había fijado ya antes en esto, pero nunca con la idea de escribir sobre ello después. hasta que el sábado por la tarde pasamos un momento por casa de los padres de Mathias. Estaban de viaje, y la casa llevaba vacía más de una semana, de modo que no olía a gente, ni a comida, ni a ambientador ni a producto de limpieza. No. Olía a "casa de los padres de Mathias". Y es curioso, porque es un olor perfectamente reconocible que se pega a la ropa. Lo digo porque, cuando Mathias pasa por ahí unas horas y llega luego a casa, él huele a "casa de los padres de Mathias". Es curioso, y es verdad y, ahora que intento recordar olores mientras escribo esto, me vienen a la memoria los olres de casa de amigos y familiares, cada uno particular y, como decía al principio, intransferible.
El caso es que no puedo determinar cómo huele nuestra casa. Es el único olor que no puedo condensar en mi mente, reconocer, clasificar. Qué cosas. Cuando nazca el bebé seguro que olerá a bebé (me encanta!!!!!!!) pero...y ahora, a qué huele?

jueves, 4 de febrero de 2010

Voy a ser madre

Se acerca la fecha y, aunque no siento nervios, ni miedo, sí muchas ganas de hablar de ello, de cómo me siento, de las molestias y de la falta de sueño por las noches y los dolores que, seguro, se verán más que recompensados cuando tenga a nuestro hijo en brazos.
Un hijo.
Después de ocho meses dentro de mí me parece que llevara toda la vida embarazada, que no ha habido nunca una Lydia sin tripa.
Lo siento como algo muy natural, que tenía que ocurrir, y ya no puedo imaginarme (imaginarnos) sin visitas al ginecólogo, ropa rara que se da de sí, libros y folletos sobre embarazo y bebés (aunque no hemos comprado ninguno nosotros mismos y hemos evitado que el poderoso lobby de bebés nos presione, al final te llegan, gratis o en forma de regalo) o caminando otra vez como una persona y no como un pato.
Al mismo tiempo, es un milagro, algo tan grande, tan hermoso, tan nuestro, que no puedo evitar sentir que ya le amo, aun cuando no le he visto nunca, no le he tocado, no le he olido ni sentido su piel o su llanto. Sé que miles de millones de mujeres han tenido, tienen y tendrán hijos a lo largo de la historia, y que yo no soy especial por ello, ni única. Y, sin embargo, me siento justamente especial y única. Sigo y seguiré siendo Lydia, claro, pero yo ya me veo y me siento a mí misma de otra manera.
Y, sí, ya tenemos casi casi todo preparado para cuando nazca. La ropa, el carrito, las cosas para llevar al hospital, el nombre (que no voy a desvelar, habrá que tener un poco más de paciencia), biberones y algún chupete y hasta una lista de regalos en una tienda, como si fuera una lista de boda (que nosotros no tuvimos que hacer) pero para tu hijo. Sé que suena todo a aburrido y a "padres", pero es que lo vamos a ser. Y me ha nacido un fuerte instinto como de protección, de "previsión". Con lo que yo ya era...

También he hecho un par de cds (bueno, ya no son cds, sino en mp3, hoy día...) para nosotros dos: uno con música clásica para él y otro muy muy cortito con canciones que a mí me gustan y me relajan, que espero que él asocie a ese estado de tranquilidad cuando, una vez nacido, se las ponga. Además, he seleccionado fotos de nosotros dos (Mathias y yo) con amigos y familia de estos 9 meses, y estoy haciendo un álbum con ellas.
Uno de verdad, para que las vea siempre que quiera y no corramos el riesgo de que, con la fotografía digital, algún día todos estos recuerdos desaparezcan. Quiero que vea cómo somos ahora, qué hacíamos con nuestros amigos, salir, beber cervezas, las fiestecillas, los viajes. Qué aspecto tenemos en el año 2009-2010 y, con nosotros, la familia y los amigos a los que se acostumbrará a ver desde que nazca.
Bueno, siendo yo, a todo esto no podía faltarle un diario, en el que escribo para mí y para él desde septiembre. Quizá algún día quiera leerme y así conocerme un poco mejor.
Y, por supuesto, la pregunta, casi la única que me hago: seré una buena madre? Claro que haré todo lo que pueda y sepa y aprenda para ello, pero quiero dar lo mejor de mí misma, y nadie puede asegurarme que lo seré. Siempre y en todo momento.


Seguiría escribiendo infinitamente sobre esto, porque es uno de los grandes milagros que han ocurrido en mi vida, pero no quiero pecar de cursi (más aún) o pesada.
En cualquier caso, por suerte, cada día que pasa es, literalmente para mí, un día menos.

Querido diario:

Qué bien que, a partir de ahora, algunas semanas habrá fútbol en España todos los días. Ya se pueden jugar partidos de liga los lunes y los viernes, de modo que, las semanas que haya competiciones europeas, circo todos los días. Y el pan?

Me hace sumamente feliz también la burocracia, de cualquier país, sea España o Bélgica o las islas Caimán (bueno, según lo que vi ayer en "Españoles en el mundo", es una excepción, pero tienes que ser poco menos que rico riquísimo para ir a vivir allí). Y lo digo porque me encanta no tener aún mi libro de familia belga (y lo pedí en octubre de 2008, y tras seis visitas al ayuntamiento y una amenaza de queja oficial quizá lo tengan antes de que nazca mi hijo, qué suerte la mía) o tener que irme hasta Bruselas bebé en brazos cuando nazca para poder registarle como español en el consulado. No puedo mandar los papeles por correo o similar, no, in person. Qué bien me lo voy a pasar yendo de excursión al consulado en tren, 100km en total, con un bebé recién nacido. Lo que yo te diga, querido diario, la burocracia es la sal de la vida.

Pero no todo son alegrías en mi vida, no te creas. El lunes vi un reportaje acerca de un misionero español (ex obispo, dejó su cómoda vida en España hace veinte años para vivir con y trabajar para los pobres) que no para de darlo todo por los pobres de Santa Cruz, en Bolivia; increíble, admirable, con un coraje y una determinación y una energía y una alegría constante que me removieron el alma. Somos unos privilegiados, joder, y debería ser consciente de ello todos los días y hacer algo al respecto. Y no lo soy y hago más bien muy poco. Algo debe cambiar en mi vida.

Querido diario, hablando de privilegiados, yo lo soy por poder compartir mi vida con un hombre como Mathias, de verdad lo digo. Por mil motivos. Uno de ellos, porque me anima, nos anima a los dos a ser creativos, a buscar constantemente. Dos de las ideas que últimamente tenemos gracias a chispazos de los suyos son:
- hacer nuestra propia pizarra en la casa nueva, una como las de toda la vida, así, negro-verde, para poner en la cocina o el salón o el pasillo (aún no lo hemos decidido) como se ve en muchos bares y restaurantes por aquí últimamente. Como diría mi hermano, mola piruletas!!!! Y para el enano(s) una blanca; por lo visto existe un tipo de pintura blanca especial sobre la que puedes pintar y luego se borra fácilmente. Joé, nos vamos a poner morados de pintura y de tiza y de guarrear con él. Para un crío tiene que ser guay, una pared entera para pintar!!!
- ya que yo me canso tan pronto por las noches y casi no salgo más que para cenar o cosas así, pues hacernos un ciclo de cine clásico. Ya llevamos "Ciudadano Kane", "El tercer hombre" (qué grande, qué grande!!!), "Qué bello es vivir", "Psicosis" y tenemos en lista "Ladrón de bicicletas" (que no he visto nunca), Hitchcock, "Lolita", "Mean streets", "French connection", "Sin perdón" y muchas más de casi todos los géneros y épocas, como se ve.

En fin, querido diario. Como comentaba el otro día, "Invictus" de Clint Eastwood me parecía una peli para llevar a Morgan Freeman a los oscar. El anuncio de los candidatos me lo confirma, así como un reportaje que echaron el otro día sobre la peli en Informe Semanal. No sé, me quedo con la impresión de mucho Freeman y poco Mandela, que, oye, fenomenal, eh? De eso viven los actores. Y él lo es, como la copa de un pino.

lunes, 1 de febrero de 2010

Un varios

Porque hace ya varios días que no escribo, así que las palabras se han acumulado.

Ya he encontrado el trabajo(s) ideal, aunque creo que ya lo he mencionado alguna vez: quiero que alguien me pague por viajar a países exóticos, por conocer a gente totalmente distinta y comer otras comidas y hacer muchas fotos y después, o bien escribir una guía, o bien ser la presentadora de un programa tipo "Españoles en el mundo" (habrá que hacerse periodista para presentar un programa como ése?) o una cocinera que usa su cocina como excusa para patearse mercados y ciudades en busca de la auténtica comida autóctona u otras variedades gastronómicas. No soy exigente, cualquiera de estas tres opciones me vale, incluso otras similares. Viajera profesional. Y es compatible (es ideal, ahora que lo pienso despacio!!!) con ser espía. Que alguien de esos gremios lea esta entrada, por favor!!!!!!!!!
Esta súbita necesidad de viajar me ha venido los últimos días porque he descubierto que puedo ver online lo de "Españoles en el mundo" que, sin ser un super programa de documentales, me relaja un montón y me pone los dientes largos. Además, mi amiga Cristina envió la semana pasada un email con unas fotos espectaculares de Filipinas (buceo y playas de arena blanca con comida sobre hojas de palmera o algo así incluidas, el lote completo) y estoy un poco cansada del frío y el invierno y me quiero escapar. Cóctel molotov.

Mientras consigo que alguien me contrate de espía-viajera-embarazadísima, me ha dado ahora por hacer crucigramas y ejercicios de pensamiento lateral.Uuuuuuuuu, empollona.
No, es que en los últimos dos-tres meses de embarazo se pierde mucha memoria por no sé qué leches de las conexiones neuronales. Memoria de poca monta, nada serio. Pero, como los yayos, tengo que hacer ejercicios de "gimansia mental". "Tengo que" porque quiero, claro. Y lo de los crucigramas tiene su aquel, oyes. No, al sudoku no me he dado todavía, los números me dan más pereza.

Hablando de memoria, el jueves pasado encontré por pura casualidad (mientras terminaba un libro de texto para las clases de la uni que estoy corrigiendo y mejorando) dos poemas que escribí hace casi dos años, en marzo de 2007. Mágica casualidad, porque me he puesto a escribir otra vez gracias a esos dos poemillas. Los secretos que a veces se esconden y nos esperan cuando nosotros menos lo esperamos, verdad?

Ya termino, con una reseña de cine. Dos. El viernes vimos la última de Batman, "The dark knight", y tengo que reconocer que me reconcilió con ese tipo de pelis. Bastante buena para ser de un género que no es mi favorito, a nadie se le escapa. Grata sorpresa, pues. Y Christian Bale es el mejor!!!!(junto con Edward Norton y Daniel Day Lewis y Liam Neeson, claro)
Pero un poco decepción la última de Eastwood, "Invictus". Quizá es que esperaba mucho de ella?No sé si es que está muy orientada ya a los Oscar o qué, pero peca de yankee en demasiadas escenas con frases rimbombantes que hacen de Mandela un personaje de otro planeta, como si no fuera humano, no sé. Hecha de puta madre, y con escenas de partidos de rugby muy espectaculares (no sé cuán fidedignas serán), eso sí, pero, mmmm, no es de las mejores de Clint. Y no he leído aún las críticas, no sé si coincidirán con la impresión que me dejó.

Acabo de escaldarme la lengua con el té, creo que hay pocas cosas tan molestas como ésa, uf...