miércoles, 28 de octubre de 2009

Es un niño!!!

No puedo aguantarme, lo siento! Y, aunque a algunos os veré este fin de semana y podría contároslo en persona, tengo que decir que hoy me he hecho otra ecografía y se ve claramente que vamos a tener un niño!!!
Estamos super emocionados, es un día grande para nosotros ;-)

lunes, 26 de octubre de 2009

Horario de invierno

Dicen que así se ahorra energía, pero aquí, por el norte, se hace de noche a las 6 de la tarde desde ayer. Y, sí, por la mañana vueve a ser de día cuando nos levantamos, pero eso de que se haga de noche tan pronto, joé, me convierte en un oso que quiere hibernar, de verdad.
A lo mejor fue que, como habíamos estado de bodorrio el día anterior, y con esta pancha que empieza a pesar un poco, pues estaba cansada (lo cual es verdad). Pero, juergas y sus consecuencias aparte, este cambio de horario a mí me da ganas de dormir y de pasar más tiempo en el sillón leyendo, viendo pelis y tomando chocolate caliente. Como las yayas, vamos.

Quién decide esto, por cierto? Lo de cambiar la hora dos veces al año, me refiero.
Si alguien sabe la repsuesta, por favor, que tire la primera piedra.

PD: Así como nota al pie, os cuento que ayer por primera vez puedo notar Mathias cómo se mueve el bebé!!!Para mí es ya una sensación familiar, pero él flipó, como no podía ser de otra forma ;-) Por cierto, que el miércoles voy a hacerme otra ecografía, a ver si esta vez se deja de timideces y podemos ver qué es. Os mantendré al tanto...

viernes, 16 de octubre de 2009

Miedos

Todo el mundo tiene miedo a cosas, o personas, o situaciones. Yo no soy menos.
Me da bastante miedo dormir sola (oigo voces, ruidos, pienso que alguien va a entrar en casa para hacerme algo malo, no descanso del todo...), los perros (especialmente estos de raza peligrosa, los tipo rotweiler, pittbull y demás bichos del estilo, ya sabéis a qué me refiero) y conducir (el caso es que, cuando me pongo a ello, se me da bien y, tras unos minutos en que le he cogido el truquillo al coche de nuevo, ya desaparece ese miedo)
Pero hay que hacerse mayor y, si no es por las buenas, pues por las bravas: los miedos hay que superarlos.
Como Mathias está de viaje, esta semana he dormido (aún me quedan dos noches) sola y tengo que decir que no me ha dado miedo!!!! De verdad. Y por el embarazo me he despertado y desvelado y ni aún así. Creo que puedo decir que lo he superado, y para mí significa mucho.

Conducir. Me he levantado hoy sabiendo que tenía que hacer una compra grande,he visto por la ventana que llovía a cántaros y el coche de Mathias lleva toda la semana muerto de pena porque él está de viaje. Me he buscado excusas, pero al final lo he cogido y, coño, como siempre, todo ha ido bien, sin problemas. Otro gallifante para Lydia, y también significa mucho.
Lo de los perros...Bueno, llegará, estoy en ello, je,je. Quizá necesite otra semana de terapia de choque y yo sola para que no me quede más remedio que superar el último de mis miedos.

Joé, estoy contenta, lo admito. Tenía que sacarle el lado positivo a estos días de soledad (vale, he visto a amigos, he ido a trabajar,a ver exposiciones, al festival de cine, etc...no es que haya estado recluída cual ermitaña, claro que no) y se lo he sacado.
Y me siento muy bien por ello.

jueves, 15 de octubre de 2009

Impacto

Estoy perdiendo el impacto que el libro "23 pandoras" causó en mí, la energía y las ganas de volver a escribir poesía, sentirla en la punta de los dedos, llenar el cuaderno con más que garabatos de diario.
Como se me pierde el impacto de tantos otros poemas, libros, películas, palabras, imágenes, fotos, cartas, canciones, paisajes, momentos, besos, olores.
Siempre me juro a mí misma que quiero y debo guardar ese impacto dentro de mí pero, al final, se van diluyendo con el tiempo.
Me entristece.
Y es materia para una entrada de blog.
O para un poema.

lunes, 12 de octubre de 2009

Ya se mueve

Bueno, se movía hace ya semanas, pero ha sido hace unos días que yo he empezado a notarlo.
Hablo del bebé en mi tripa, que te dan obvio como es para mí casi se me olvida decir de qué estoy hablando.
No, no son patadas y no sé si otra persona, poniendo la mano, puede notarlo. Para mí es una sensación muy agradable, como si fuera una pelusilla que de vez en cuando no para durante varios minutos y, otras veces, sólo da un golpecillo y se está quieto ( o quieta).
Es una sensación totalmente nueva, y me recuerda que dentro de exactamente el mismo tiempo que ya llevo embarazada, habrá una nueva personita en el mundo.
Qué grande.
A veces no tengo palabras para describirlo, sólo lágrimas, o sensaciones. Y sé que no soy la primera ni seré la última mujer en ser madre en el mundo, pero para mí es único y mágico.

domingo, 11 de octubre de 2009

500 days of summer

Así se llama una de las dos películas que fui a ver ayer por la tarde. Pensaba que sería simplemente una así facilona, medio comedia romántica, ideal para el domingo por la tarde, un poco alternativilla (parece una contradicción con lo de comedia romántica, pero no lo es, no) y, como tengo el abono para el festival, pues estaba en mis planes.
Qué sorpresa! Una banda sonora estupenda, los actores son muy buenos, la historia no tiene nada que ver con la clásica comedia romántica. De hecho, no sé si se puede clasificar dentro de este género, la verdad.
En fin, todo un acierto, y una absoluta recomendación para recordar cuando la pongan en el circuito comercial, de verdad.
Combina muy equilibradamente el humor, el amor, la ironía, los diálogos frescos y orginales pero nada forzados con escenas en las que toooooooodo el cine ser reía a carcajadas o lloraba de emoción o con el corazón un poco roto.
Quizá no pase a la historia del cine, pero en IMDB (Internet Movie Data Base) tiene ya una puntuación de 8.3, que no es moco de pavo y menos en esta página.
Y, lo que es más importante, a mí me hizo pasar una tarde de domingo ideal y volver a casa con un sabor de boca tan bueno, que aún hoy dura...

Sesión de fotos



Mi amiga Silvia se ha puesto a estudiar fotografía al tiempo que sigue trabajando.
Resulta que en la escuela le han mandado varias tareas, y una de ellas es hacer tres fotos distintas de la misma persona. Distintas en cuanto a luz, composicón, lugar, distancia, y otras cosas técnicas que yo no domino.
Me preguntó si no me importaría que me las hiciera a mí y yo, cómo no, pues encantada, oye.
Quedamos el sábado por la tarde y la sesión fotográfica (en blanco y negro todas) empezó en un parquecillo cerca de su casa por el que nadie pasó en los casi 20 minutos que estuvimos ahí. Todo muy normal, yo posando según ella me iba diciendo (es una sensación muy relajante, al menos para mí, porque no tenía que hacer nada, sólo quedarme quieta en la postura que ella me dijera y, a partir de ahí, podía dejar que la mente se me fuera por ahí, todo un lujo para el que no siempre tengo tiempo...) y ella haciendo sus fotos. Hay algunas preciosas que, en cuanto me pase, colgaré aquí, para que las veáis.
Pues eso, todo muy normal. Decidimos entonces acercarnos hacia el centro, porque yo tenía entrada para una peli del festival de cine. Por el camino pasamos por delante de una tienda de ropa y zapatos de baile, una tienda chulísima llena de tutús y zapatillas y zapatos de flamenco o tango. Probamos aquí? Venga, por qué no, claro.
Y empezó la diversión. La gente que entraba en la tienda se quedaba mirando fijamente, especialmente los niños, que no tienen la vergüenza de los adultos de quedarse embobados mirando a alguien. Silvia no podía ver nada de esto, claro, enfrascada en la cámara y haciendo fotos como estaba; pero yo lo veía todo, porque era a mí a quien la gente miraba, como intentando reconocer quién era. Pues, mira, se parece a alguien de la tele, pero ahora no caigo a quién...
Seguimos en dirección al cine ( que, realmente, es un edificio en el que se encuentra un teatro, dos cines, sala de baile, un café muy chulo...). En el Vooruit, que así se llama el sitio, se reúnen siempre los artistas y modernetes de Gante de modo que, cuando Silvia encontró un sitio guay para seguir con las fotos, pensé que nadie se daría cuenta, que cosas más raras se ven ahí.
Pues no sé si será por lo del festival de cine y que la gente tiene sed de famosos, porque llama la atención ver a una embarazada posando o qué, pero el caso es que aquí nos miraban aún más.

Fue tan divertido!!!!Y, claro, no creáis que una foto y ya, no, estuvimos nuestros buenos 10 minutos. Pero nunca me lo he pasado tan bien sintiéndome observada.

Lo mejor de todo es que, además, las fotos son muy chulas. Aquí hay un par.

viernes, 9 de octubre de 2009

Vivir con menos internet

Es que se nos ha roto el cable de la batería del ordena, y tardarán unas dos semanas en darnos otro. Mientras tanto, no es que estemos completamente sin internet, pero de una manera así sui géneris: con el portátil viejo de Mathias, que se recalienta con ná, y con el cable conectado al módem, que sin cable no va.
Total, que no es el fin del mundo. Al contrario!!!No lo tengo tan a mano, tan inmediato, y me organizo mejor el tiempo que le echo a internet, de verdad. Sólo leo el correo una vez al día ( cuando normalmente estoy constaaantemente conectada) y estoy más concentrada en lo que hago.

Todo ventajas. Lo suyo sería continuar en esta línea cuando el ordena esté reparado. A ver si no lo olvido.

lunes, 5 de octubre de 2009

Otoño

Ya es oficial, ha llegado. Llueve, hace fresco, y el edredón es ya el de invierno. Pijama de manga larga, calefacción encendida.
Sustituimos las ensaladas por sopitas y el refresco por un té bien calentito.
Además, aquí todo el mundo ha cambiado ya los helados ( de los que son suuuuuuuuuuuuuuuper fans en verano, de verdad que TODO EL MUNDO toma helados desde abril hasta octubre) por el gofre.
Mmmmmmmmmmmmm, el rico y calentito gofre...

viernes, 2 de octubre de 2009

Yo también quiero ir a Cophenaghe

Total, qué más os dará pagar un poquito más, un billete de avión, una habitación ( no necesito una suite como el rey, ni como la reina, ni como zZapatero, cada uno la suya, claro, que ir en plan ahorrador, pues no...), las comidas, cenas, lo que me apetezca beber y picar...En fin, que yo soy una apasionada del deporte español, siempre lo he sido. Como Espe, Rajoy, Moratinos, ...
Que no es por aprovecharme, que no, qué mal pensados, que es por defender el espíritu olímpico y que los juegos vengan a Madrid, que todo el mundo sabe que no son un negocio, qué va...
Y, de paso, pues conozco a Obama y lo mismo salgo en la tele, que con el despliegue de medios que se han montado...