lunes, 8 de abril de 2013

Los otros

Voy camino de mi 5° cumpleaños, dentro de poquitos días, y estoy atravesando una crisis existencial.
Resulta que miro  a un lado y a otro y veo que los demás blogs tienen una personalidad mucho más marcada. Saben lo que quieren, lo que son, de dónde vienen y a dónde van, cuál es el sentido de su existencia. 
Los hay de cerveza (bueno, ese empezó siendo de filosofía, cerveza y fotografía, pero pronto descubrió quién era realmente, y mira lo bien que le va hoy). 
De comida, ahora que tan de moda está cocinar y todos lo hacemos cual Jamie Oliver o Ferrán Adriá, según el día del mes. Pero con este, además, te ríes que no es normal.
Conozco blogs con fecha de caducidad, es decir, escritos por alguien que se fue de Eramus a Madrid a conocer, sin él saberlo, a su futura esposa y madre de sus hijos (¿a alguien le suena?) o de una pareja que se hizo el camino de Santiago en bici desde Gante, para contar sus peripecias a mucha gente a la vez que los leía desde casa.
Blogs a dos manos (el que yo conozco es en plan modernete DIY con un toque hortera-chillón que tiene su gracia), de decoración (hay miiiiiiiiiiiiles), de repostería escrito por una chica vasca que me mola mucho no tanto porque luego lo aplique en la cocina, que para eso tengo dos manos izquierdas, sino porque pasa del toque cursi que suelen tener otros del mismo tema.
De padres y madres y sus aventuras, de profesores de ELE (Español Lengua Extranjera), de profes de primaria verdaderamente devotos de su trabajo (chapeau!), de lingüistas (de hispánicas) que reflexionan de forma interesantísima sobre diversos aspectos de la lengua española, de escritores y de un filósofo. Qué sabios son todos ellos, oye, yo me veo tan poquita cosa a su lado...
Conozco a otros blogs de viajes, de cine, de reflexión política, de poesía (dos, maravillosos, de una calidad asombrosa).

Todos ellos con su aspecto bien cuidado, que no sé de dónde sacan el tipo de letra y el fondo y los colores, todo tan bien pensado, tan bien hecho.
Y mírenme a mí, que sé de dónde vengo pero he cambiado más veces de chaqueta (es decir, de fondo, de título, de foto, de tó!) y de tema y de propósito que no sé bien a dónde voy.
Echo la vista atrás a estos cinco años que han pasado desde finales de abril del 2005 y, sí, hay muchas cosas que me gustan, pero veo que es todo una miscelánea, un conglomerado raro y sin rumbo fijo. 
Molan mucho más los otros.


PD: Podría poner los enlaces a todos esos blogs -que sigo, ergo los conozco, no me los estoy inventando-para que solo tengáis que pinchar e ir directamente a ellos, pero es un trabajazo, francamente. Y lleva mucho tiempo; ya sabéis, yo, en mi propoósito de hacer mil cosas distintas cada día, llevo siempre la hora pegada a donde ya sabéis. Total, que si a alguien le interesa alguno específico de los que he nombrado en este post-aniversario (vaya juego de palabras, ole) me dejáis un comentario y os paso el enlace. Y así le damos vidilla a esto de que me dejéis comentarios.

2 comentarios:

Yo, profe de español, escritora y periodista soñadora dijo...

Querida Lydia: yo llamaría a tu blog un diario stream of conciousness!! y quizá el no tener una temática definida le da precisamente su propio carácter de miscelánea...
Sigue escribiendo! Ya sabes que a mí tu blog me sirvió de inspiración para escribir el mío.

Pd: quizá por eso tu blog se llame "sin título" ;-)

Lydia dijo...

Claro, claro, elegí ese título pensando en los cuadros que una ve muchas veces en los museos y a los que sus autores no saben cómo llamar y titulan, simplemente, "Sin título".
Y que cuando lo empecé, como ahora, no tenía ni idea de qué trataría.
Has vuelto a dar en el clavo ;-)